El manso arrullo del mar,
el declinar leve de la tarde,
el minuto azul en que las aves regresan
y el silencio invade la naturaleza.
Tomé esta foto sin pensarlo, sin considerar encuadres y en automático. A pesar de ello, por motivos que poco tienen que ver con la fotografía, me trae una gran paz.
Mediterráneo, Jávea.
No me extraña, Goathemala.Es toda plata, es toda paz, no hay estridencias que perturben el meditar.
ResponderEliminarBella, serena mar.
Saludos.
Es perfecta.
ResponderEliminarCallar,
y dejar que la mirada busque.
La huelo, podés creer?
A mi tambien me da paz, tanto, que con tu permiso, la imprimo par verla a menudo. Esa arena gris es tan bella. Gracias.
ResponderEliminarPreciosa, así nomás el paisaje? realmente bello...bien por lo que captaste.
ResponderEliminarBuenas noches, Goathemala.
ResponderEliminarHermosa foto y bellas palabras las tuyas que la acompañan.
Un saludo.
O Mar Profundo
Vi un sembrado celeste
hecho de cristal vivo
parecía una pradera de zafiros
de tréboles azules y violetas .
Debajo de su tierra transparente
latía un resplandor
de prodigiosos peces
de delfines
que ríen
sobre el vano de la ola
un silencio de flores
que en lo secreto bailan.
Blanca Andreu
Precioso atardecer mediterráneo: el juego de colores en el cielo es una pasada, la magia de la naturaleza :)
ResponderEliminarMe pasé a otro blog, y ya está por cerrar.
ResponderEliminarNo te vi por allí.
Poco olfato de tu parte.
A eso se refería omar en el Infierno S.A.
y todo por
http://porelamordeunamina.blogspot.com
la Papisa y Comandanta Luciangélica
Joaquín Ramón.