lunes, 26 de mayo de 2008

LA ENCINA

Encina

Acostumbro a pasear en bicicleta con mi esposa Nahuyaca por una tierra manchega, solitaria y tranquila. La riega un minúsculo arroyo de aguas cristalinas y los encinares, abundantes y enormes, encuentran la compañía de cultivos de cebada, trigo o vid.

Se pedalea entre aromas de lavanda, tomillo y jara, casi en silencio, percibiendo poco más que la caricia del viento a los trigales.

7 comentarios:

  1. Que puedo decirte, conozco bien esos encinares, ese olor, esa brisa, ese silencio de la tierra Castellana, su austeridad y su grandeza.

    Un besazo

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  2. Preciosa composición del encinar y el campo verde transmite calma, serenidad y mucha, mucha tranquilidad.

    Preciosa

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  3. fijate maestro que te tengo que ir a visitar.

    Que decis podes hacer un lugar con el gato?

    eso para bicicletear y hacer foto, dos cosas que me encantan

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  4. Aaains, qué paz transmite la foto...

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  5. Menuda envidia me das al describir ese paseo silencioso adornado de bellas encinas y con la fragancia de esos aromas.
    Un abrazo

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  6. La foto parece una pintura. Què linda te quedò y que fortuna tienes de dartes esos paseos con tales imàgenes.

    Abrazos.

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  7. Hermosa foto...
    G. Aunque pasen los años no dejes de disfrutar estas aventuras de aromas y colores con tu pareja... Sigan descubriendo siempre nuevas rutas y nuevos caminos.
    Y si alguna ruta te parece exquísita no dejes de frecuentarla con ella.

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