Esta lumbre de poda de olivos hizo que el invierno no existiera. He pasado estos días navideños en mi pueblecito natal cerca de ella. Siempre me causó una misteriosa fascinación el fuego.
Me encantan las chimeneas, me parecen muy acojedoras... y para el frío lo mejor es sentarse a su lado con un buen chocolate caliente que te reconforte, verdad?
Me encantan las chimeneas, me parecen muy acojedoras... y para el frío lo mejor es sentarse a su lado con un buen chocolate caliente que te reconforte, verdad?
ResponderEliminarSí o buen libro. Nada calienta de esa forma. Por lo demás algo atávico nos une al fuego.
ResponderEliminar--
Saludos.
Siempre que leo tus textos me prometo sentarme a escribir partiendo de tus palabras
ResponderEliminarmejor opción no podía haber
que la que hiciste
cuánta riqueza
Què bellas fotografìas, amigo Goathemala!!!! No habìa pasado por aquì en un buen tiempo y me he deleitado... ;)
ResponderEliminarno puedo dejar de mirarlo...
ResponderEliminarcalienta mi ser
dos besos!
Guacimara:
ResponderEliminarEs de lo más acogedora. Dan ganas de sentarse al lado con ambas cosas un chocolate bien caliente y un buen libro.
Besos
Aquí entre nosotros..a mi también me gusta el fuego, como el agua. A veces me suelo nombrar: azul fuego.
ResponderEliminarEn fin, estoy un poco loca.
Linda foto.
Los maravillosos misterios de la naturaleza!
ResponderEliminar"Andaluces de Jaen", que de los olivos aprovechan hasta el calor encerrado en sus entrañas...
ResponderEliminarUn abrazo