viernes, 5 de abril de 2013

La lluvia en los bosques sin humanos




Es justo lo contrario y Cervantes que era un pícaro lo sabía y jugó con ello: conectar con el universo mítico, imaginar otras vidas, palpitar otros sentires no te vuelve loco. 

Al contrario, la lectura aporta cordura y te hace soportable el mundo.